La guía Pantone nace en la década de los 50 de la necesidad de identificar y utilizar los colores de una manera universal, ya que resultaba casi imposible emparejar las muestras o adivinar el tono que se debía utilizar.
Dicha idea surgió de Lawrence Herbert, graduado en Biología y Química por la Universidad de Hofstra en Long Island quien trabajaba como comparador de colores en M&J Levine, una empresa de publicidad de Nueva York que también era propietaria de una pequeña imprenta llamada Pantone Press.
Herbert al ver la cantidad de errores que se cometían a la hora de impresión al no tener referencias de color pensó en una solución que resultaba obvia pero que nadie había realizado, creó fórmulas para que los impresores supieran las cantidades exactas a utilizar y así obtener resultados uniformes.
A dichas recetas les llamó Pantone Matching System. Para lograrlo, redujo la lista de pigmentos básicos de 60 a 10 y creó “recetas” (combinaciones de esos pigmentos) para elaborar colores, después midió con precisión la mezcla de pigmentos necesarios para producir un tono específico y poder asignarle un número de referencia.
Durante su primera emisión, la guía consistía en 500 colores y fue a partir de ahí que la marca se disparó en popularidad gracias a la gran utilidad que tenía en distintas áreas como la textil, artes gráficas, industrial y por supuesto en el gráfico para igualar el color.
Actualmente la guía Pantone reúne más de 10,000 tonos estándares codificados, el código varía dependiendo del material en el que se aplique el color: si es gráfico, multimedia, textil…
Lawrence Herbert es el presidente y director ejecutivo de Pantone Inc., la compañía que marca los estándares de color y máxima autoridad a nivel mundial.
Sin lugar a dudas la aportación de Herbert al mundo del diseño ha sido clave y de gran valor en la industria creativa, tanto así que hoy en día no hay diseñadores que no tengan una pantonera en su estudio.
Tan GRANDE como quieras ser, Ser FADU, Sé UAT.